«El secreto en sí mismo es mucho más bello que su revelación». El trabajo de Jill Magid juega con la idea de las relaciones íntimas con el poder y la ocultación, la investigación y el largo plazo. Desde el 2013, la artista ha estado considerando las implicaciones del legado de un artista cuando una fundación o corporación privada posee el archivo de este y los derechos de su trabajo. Tema de sus investigaciones es el arquitecto mexicano Luis Barragán.